Saltar al contenido

Todo lo que debes saber sobre las varices

VArices

Contenido

¿Qué son las varices y por qué se producen?

La venas normales se encargan de conducir la sangre de cualquier parte del cuerpo hacia el corazón. Para cumplir este cometido cuentan con dos mecanismos principales:

  •  Disponen de válvulas que evitan que la sangre fluya en sentido contrario.
  • La contracción de los músculos (bomba muscular) exprime las venas impulsando la sangre en contra de la gravedad.

Una vez los músculos impulsan la sangre hacia adelante, las válvulas impiden que vuelva hacia atrás. De esta manera se garantiza el flujo hacia el corazón.

Cuando existe un mal funcionamiento de las válvulas, se produce un reflujo de la sangre en su interior. Esto aumenta la presión y provoca su dilatación. Estas dilataciones de las venas superficiales es lo que conocemos como varices. La varices no son más que una de las muchas consecuencias de esta disfunción del sistema venoso, cuyo nombre adecuado es insuficiencia venosa. Dedicaremos otro artículo para desarrollar todas estas manifestaciones.

¿Qué factores influyen en su aparición?

Existen muchos factores implicados en la aparición de las varices:

  • Edad: Las venas también se ven afectadas por el envejecimiento, que altera su correcto funcionamiento.
  • Sexo femenino : La insuficiencia venosa es hasta cinco veces más frecuente en las mujeres, debido a factores hormonales. La afección se agrava cuando la mujer está embarazada ya que el feto produce una aumento de la presión en el abdomen que dificulta el retorno venoso. También empeora con la toma anticonceptivos orales.
  •  Antecedentes familiares: Algunos trabajos muestran que el riesgo de desarrollarlas en hijos con ambos padres con varices llegaría hasta el 90%. Existen algunos genes asociados a ala presencia de varices.
  • Estatura: Cuanto más alta es una persona, mayor es el efecto de la gravedad en sus extremidades, dificultando el flujo de la sangre hacia el corazón
  • Obesidad: El sobrepeso también produce un aumento de la presión intraabdominal
  • Postura: Permanecer de pie sin caminar hace que no funcione la bomba muscular y que por gravedad aumente la presión en las venas de las piernas. Por eso las personas que trabajan muchas horas de pie, estáticas, tienen más posibilidad de tener varices.
  • Raza: Son más frecuentes en la raza blanca, siendo muy raras en la reza negra o asiática.

¿Que síntomas y signos da?

Las molestias asociadas a la insuficiencia venosa suelen empeorar a lo largo del día, sobre todo si se ha permanecido mucho tiempo de pie o sentado. Mejoran al elevar las piernas, por lo que es habitual encontrarse mejor por las mañanas. Normalmente, el uso de analgésicos no mejora la molestias.

  • Dolor: Pesadez de las piernas especialmente al final del día
  • Hinchazón: En los tobillos o las pantorrillas, que suele mejorar por las mañanas.
  • Picor: Habitual en la zona de los tobillos y especialmente cuando existen cambios cutáneos ( manchas oscuras, eccemas, o atrofia)
  • Calambres: frecuentemente por la noche.
  • Sensación de inquietud: es muy frecuente por la noche durante el descanso en la cama
  • Alteraciones de la piel: cuando existe una insuficiencia venosa de larga evolución pueden aparecer pigmentaciones oscuras, zonas de eccema, induración, sequedad o zonas de atrofia blanquecina.

¿Cuáles son las complicaciones que pueden producir?

  • Varicoflebitis: se producen cuando la sangre se coagula en el interior de la variz, provocando induración, aumento de la temperatura, coloración rojiza y dolor. Aunque no suelen ser graves, es importante un adecuado diagnóstico y tratamiento, ya que en ocasiones pueden extenderse a las venas profundas y provocar una trombosis venosa profunda
  • Varicorragia: en ocasiones las varices pueden sangrar, tanto de forma espontánea o por un pequeño roce, especialmente si existen cambios en la piel o las llamadas «perlas varicosas». Estas perlas son zonas donde la variz está muy pegada a la piel que se encuentra adelgazada. 
  • Úlceras cutáneas: Reflejan el estadio más avanzado de la enfermedad. Pueden aparecer por mínimos traumatismos, un simple rascado, o incluso de forma espontánea. Suelen aparecer en la cara interna de la pierna, justo por encima del tobillo. Suelen ser dolorosas, muy difíciles de curar y pueden infectarse con facilidad. Tienden a cronificarse  y persisten durante meses e incluso años si no son adecuadamente tratadas.
  • Celulitis: Por las alteraciones producidas a nivel de la piel, ésta se vuelve propensa a las infecciones. Estas infecciones provocan la inflamación de la piel, que estará roja, caliente, indurada y dolorosa. Aunque la mayoría suelen resolverse con Antibioterapia oral, en ocasiones pueden provocar cuadros más graves con fiebre y alteraciones del estado general. En estos casos, puede ser preciso el ingreso hospitalario para administrar antibióticos intravenosos.

¿Qué tipos hay?

  • Teleangiectasias o arañas vasculares. Son dilataciones de venas muy pequeñas situadas dentro de la propia piel. Son tan pequeñas que, normalmente, no se ven a simple vista, aunque cuando se dilatan se puede apreciar su recorrido a través de la piel en forma de caminos de color azulado. En su gran mayoría suelen ser un problema exclusivamente estético.
CEAP 1
  • Varices reticulares. Son dilataciones de venas subcutáneas  de pocos milímetros. Son mayores que las arañas vasculares y pueden palparse. Pueden ir asociadas a molestias ocasionales en forma de picor o  cansancio de las piernas.
  • Varices tronculares. Son dilataciones de los troncos principales del sistema venoso superficial o de sus ramas. Se palpan con claridad y suelen producir síntomas. En algunas circunstancias, pueden producir complicaciones como varicoflebitis, varicorragias o alteraciones en la piel en forma de oscurecimiento , eccema, induración e incluso ulceración.
VArices
CEAP 2

¿ Como se diagnostican?

En la actualidad, la prueba de elección para el diagnóstico es el Eco Doppler. Es una prueba no invasiva, que no usa radiación y es indolora. Aporta información, tanto de las alteraciones anatómicas del sistema venoso como de su funcionalidad.
En ocasiones, puede ser necesario el uso de la resonancia o el TAC, especialmente en el estudio del sistema venoso a nivel pélvico y abdominal. También puede ser necesaria la inyección de contraste y el uso de rayos x (Flebografía), aunque normalmente se limita sus uso a la aplicación de determinados tratamientos.

¿Cómo se tratan?

  • Tratamiento físico y postural: Es la base del tratamiento de la insuficiencia venosa y debe aplicarse siempre, con independencia de la aplicación de otras terapias.
  • Soporte elástico: Consiste en el uso de medias de tejidos especializados para provocar una compresión graduada creciente desde el pie hacia el resto de la pierna. Su eficacia está claramente demostrada, siendo incluso superior al tratamiento farmacológico
  • Tratamiento Farmacológico: Existen multitud de fármacos que buscan mejorar la función del sistema venoso. Se les conoce como flebotónicos. La gran mayoría son derivados de extractos vegetales como los flavonoides, los rutósidos, el extracto de castaño de indias, de hojas de la viña, el Ruscus o el Ginko biloba.
  • Tratamiento quirúrgico: Consiste en la ligadura  y extracción de la vena safena malfuncionante y las ramas varicosas, mediante una herida en la ingle de unos pocos centímetros y pequeños cortes milimétricos en la pierna. Existen técnicas que intenta evitar la extraccion de la vena safena como el CHIVA o el ASVAL
  •  Tratamientos mínimamente invasivos
    •  Ablación térmica: consiste en producir una atrofia de la vena mediante la aplicación de calor. La fuente de calor puede ser la radiofrecuencia, el láser o el vapor de agua.
    •  Ablación química: en este caso se busca la atrofia de la vena mediante la agresión sobre la pared de varios agentes químicos conocidos como esclerosantes
    •  Ablación mecánico-química: En esta terapia se combina el efecto de los esclerosantes con una agresión física de la pared de la vena, provocada por algunos tipos de catéteres.

¿Cual es la evolución de la enfermedad?

La insuficiencia venosa se considera una enfermedad crónica e incurable. Los tratamientos quirúrgicos van encaminados a mejorar los síntomas. Por ello, es de vital importancia seguir a rajatabla el tratamiento médico y los autocuidados para ralentizarla y evitar la aparición de complicaciones. Aunque se considera una enfermead benigna puede tener un gran impacto en la calidad de vida.

Comparte este artículo en tus redes